Masaje Facial

1. Ambiente relajante y armonioso: El masaje facial se realiza en una sala con luz tenue y música suave, para que el cliente disfrute de un momento de relajación profunda mientras recibe los beneficios del tratamiento.
2. Limpieza facial y preparación de la piel: El tratamiento comienza con una limpieza suave del rostro para eliminar impurezas y preparar la piel para recibir los productos activos.
3. Masaje lifting con movimientos ascendentes: Se aplican técnicas de masaje lifting facial, enfocadas en elevar los músculos del rostro, con movimientos ascendentes en áreas clave como los pómulos, la frente, el cuello y la mandíbula. Estas maniobras ayudan a tonificar la piel y reducir la apariencia de líneas finas y arrugas.
4. Aplicación de aceites esenciales y cremas rejuvenecedoras: Durante el masaje, se utilizan aceites esenciales o cremas específicas que contienen ingredientes activos anti-edad, como el ácido hialurónico, colágeno o vitamina C, que revitalizan la piel, aportando hidratación profunda y mejorando su elasticidad.
5. Técnicas de drenaje linfático: Se incorporan maniobras suaves para estimular el drenaje linfático del rostro, lo que ayuda a eliminar toxinas, reducir la hinchazón y descongestionar las áreas inflamadas, como los ojos.
6. Finalización con masaje relajante en cuello y hombros: El tratamiento concluye con un suave masaje en el cuello y los hombros, que alivia la tensión acumulada y deja al cliente en un estado de relajación total.

Este Masaje Facial es ideal para quienes buscan mejorar el tono y la elasticidad de la piel, reducir los signos de envejecimiento y obtener un rostro más luminoso y descansado. Además de sus efectos estéticos, proporciona una experiencia relajante que reduce el estrés y revitaliza todo el cuerpo.